Seguramente, en más de una ocasión te has decidido a estudiar inglés o cualquier otra cosa, pero al cabo de unos días lo has acabado dejando porque te aburrías, te cansabas o simplemente “surgía” algo mejor que hacer. Hoy te traemos 7 consejos que te permitirán mantenerte centrado y conseguir tus objetivos. No sólo vas a conseguir mantener el hábito de estudiar, sino que lo vas a hacer de una forma más efectiva. ¡Vamos allá!
1.- Enlaza el hábito de estudiar con otro hábito que ya tengas.
Ya mencionamos los hábitos antes, y es que son algo tremendamente importante. El primer consejo es que enlaces el hábito de estudiar con otro que tengas interiorizado. ¿Qué significa esto? Es muy simple, estudia siempre después de un hábito algo que ya haces cada día. Por ejemplo, por la noche siempre tienes el hábito de lavarte los dientes (o deberías tenerlo… :D), pues sería una buena idea conectar el hábito de lavarte los dientes con estudiar, así será algo que haces automáticamente, y no algo que requiera esfuerzo o fuerza de voluntad.
Redacta una lista con todos los hábitos que ya tienes en tu día a día y elige donde te viene mejor incluir el tiempo de estudio.
El tema de los hábitos es algo fascinante, y que te puede ayudar a ser más productivo. Si quieres saber más hay una gran cantidad de recursos en Internet que explican como sacar el máximo partido al poder de los hábitos.
2.- Realiza una planificación semanal.
Lo sé, estás súper motivado y quieres empezar ya a comerte el mundo, pero espera un momento. Empieza planificando tus sesiones de estudio. Decide qué quieres estudiar y cuando lo vas a hacer. Escribe en una agenda que vas a hacer cada día y al final de cada día tacha lo que hayas hecho. Si ves algo escrito te vas a auto-obligar para hacerlo y sentir la recompensa de tacharlo.
Asegúrate de que lo que planificas es algo alcanzable. No te pongas metas demasiado exigentes, ya que cuando no puedas alcanzarlas, te vas a sentir desanimado y perderás las ganas de seguir estudiando.
3.- ¿Qué tipo de estudiante eres?
Para sacar el máximo provecho a tu tiempo de estudio tienes que conocerte bien. Para ello sólo tienes que responder a esta simple pregunta. ¿Qué tipo de estudiante eres? Los cuatro posibles tipo de estudiantes son los siguientes:
- Orales. Aprenden mejor escuchando las lecciones, adquieren la mayoría de sus conocimientos escuchando hablar al profesor.
- Visuales: Comprenden las explicaciones mucho mejor si cuentan con imágenes y esquemas.
- Intrapersonales: Prefieren estudiar por sí mismos, encontrar información complementaria y realizar sus propios mapas conceptuales.
- Kinestésicos Aprenden a través del movimiento. Su memoria se activa con sus movimientos más que con los estímulos orales o visuales.
Seas el tipo de estudiante que seas nuestras clases se adaptan a tus necesidades. Tienes explicaciones orales en los vídeos, cuentan con imágenes y esquemas que activan tu memoria visual, dispondrás de las transparencias para que tomes notas y crees tus propios apuntes y, al ser compatible con dispositivos móviles, podrás disfrutar tus clases en movimiento donde vayas.
4.- No estudies durante mucho tiempo.
Un momento, ¿Hay que estudiar menos para aprender más? Déjame decirte que es mejor estudiar un poco cada día que estudiar cinco horas el primer día y acabar agotado y aburrido. Con una hora al día es más que suficiente. Puedes estudiar en intervalos de 25 minutos y descansas cinco. Esto te mantendrá más despejado y receptivo a nueva información.
5.- Fuera distracciones.
Es importante que estudies en un entorno que te permita concentrarte. Intenta evitar estudiar cerca de la televisión, de la videoconsola o aquello que reclama tu atención. En relación con lo que vimos antes de los intervalos de 25 minutos, es importante que tengas el móvil lejos de tu alcance durante ese tiempo, o al menos le quites el wifi y los datos. Cada vez que recibes una notificación tu mente presta atención al móvil en lugar de a lo que estabas haciendo.
6.- ¿Estudiar con música?
Si por música te refieres a reggaeton, la respuesta es NO. Por otro lado, si la música te ayuda a concentrarte de verdad, puede ayudarte ser un gran aliado. Eso sí, evita escuchar música que ya te sepas la letra, porque tu mente se centra en la canción y no en tus apuntes. Lo que mejor funciona son canciones instrumentales.
7.- Principio de Pareto o Principio 20/80.
El principio de Pareto dice que con un 20 por ciento de nuestros esfuerzos, conseguimos un 80% de los resultados. Por ejemplo, si contamos el tiempo que se tarda en aprender un idioma, con el 20% de nuestro esfuerzo aprendemos el 80% del idioma. Para perfeccionar nuestras habilidades, tenemos que dedicar mucho más tiempo.
Por eso, cuando estés estudiando, si algo se te atraganta, pasa a lo siguiente. Así aprovecharás mucho mejor tu tiempo. Si tienes una duda con nuestras clases, coméntanoslo y pasa al siguiente punto. Nosotros te contestaremos lo antes posible.
En resumen, la clave para sacar el máximo rendimiento a tus ratos de estudio es tener el hábito de estudiar siempre a la misma hora o el mismo momento cada día, planificar tu rutina de estudio y tomártelo con calma. Si sigues todo estos consejos, estudiar inglés o cualquier otra cosa que te propongas será coser y cantar.